De todos es sabido que dar el pecho ofrece multitud de beneficios tanto para la madre como para el niño, pero, ¿Qué pasa cuando nuestros hijos se ponen malitos?. Pues que esos beneficios se multiplican hasta el infinito.
Hace casi una semana que mi hijo de diecisiete meses se puso realmente malito por primera vez. Ya es todo un logro y estoy segura de que la teta ha jugado un buen papel en protegerlo así de bien hasta ahora. Ha tenido gastroenteritis aguda y de regalo yo la cogí también tres días después.
La verdad es que se pasa realmente mal viendo a tu hijo así y sabiendo que no puedes hacer mucho mas que darle amor, abrazos, muchos besos, limpiarlo cuando vomita o cambiarle el pañal cuando el virus hace de las suyas y velar a su lado mientras intenta dormir, te sientes realmente impotente de no poder quitarle el dolor, ni las nauseas ni el malestar…desearías pasar todos esos síntomas a tu propio ser a cambio de que él se ponga bien y se sienta mejor…le pides a Dios que se cure pronto, realmente no soportas verlo malito….aisssssss, así somos las madres…
Pero hay una cosa que sí le podemos ofrecer y que le hace tanto bien…y eso es nuestro pecho y nuestra leche y más en el caso de este fastidioso virus que te deja hecho polvo.
Porque cuando se sienten así de malitos no pueden comer, apenas pueden beber líquido porque todo se vuelve afuera demasiado pronto. Ya sabemos que en los niños sobre todo el mayor riesgo de sufrir una gastroenteritis es la deshidratación por esos vómitos y diarrea continuos.
Además y especialmente en niños como el mío que no sabía lo que era vomitar y que lo mas grave que ha llegado a tener es un simple resfriado, estos lo pasan muy muy mal, pues no solo se sienten fatal sino que sienten mucho miedo, no saben lo que les está ocurriendo y se asustan cada vez que vomitan… y necesitan todo nuestro consuelo y amor, todo nuestro apoyo y protección para sentirse seguros en una situación asi.
Y si, podemos abrazarlos, besarlos, consolarlos, cuidarlos, amarlos, podemos dormir a su lado para que se sientan mejor, pero esta vez me he dado cuenta que hay algo que les hace más bien incluso que todo esto y eso es la teta.
He descubierto que la teta es mucho mas incluso de lo que pensaba, es casi como una poción milagrosa que todo lo cura…
En la mayoria de casos de gastroenteritis que he vivido cercanos en mis sobrinos, hijos de amigos, etc. Estos niños han estado fatal al menos una semana, incluso dos. No toleraban nada de nada e incluso algunos de ellos han tenido que ser ingresados en el hospital por deshidratación.
Pero, soprendentemente mi hijo lo pasó realmente mal los dos primeros días, lo echaba todo, ni agua, ni suero oral, ni muchisimo menos comida…por tanto llegó un punto en que lo rechazaba todo, no quería tomar nada de nada, pero hay una cosa que nunca, en ningún momento dejó de hacer y eso fue MAMAR.
Mi hijo no soltó su teta en ninguno de los días que estuvo malito. ¿Alguien pone en duda ahora que la teta es solo alimento, o agua?. No, la teta es alimento para el alma, es alimento emocional, la teta es lo más divino que se puede encontrar sobre la Tierra.
Porque esa teta, esa leche, ese calor, ese contacto continuo piel con piel, ese olor y esa ternura hicieron que mi hijo, a pesar de su estado no se deshidratara en ningún momento, consiguió que a pesar de no poder probar bocado en cuatro días estuviera perfectamente nutrido y alimentado y sobre todo y lo más importante, la teta hizo que mi hijo dejara de sentir ese miedo y se sintiera seguro en mi pecho, en el pecho de su madre y con esa dulce leche que le hacía olvidar lo mal que lo había pasado minutos antes. Cada vez que vomitaba lloraba aterrado, al momento se agarraba a mi pecho como si le fuera la vida en ello y en pocos segundos estaba relajado y tranquilo junto a su mamá.
No me quiero maginar, cómo hubiéramos pasado estos horribles días sin ese pecho, sin esa leche y sin ese consuelo. No quiero imaginar lo mal que mi hijo lo hubiera pasado sin esa teta, qué hubiéramos hecho para poder hidratarlo sin acabar en el hospital.
Si, llegará el día en que lo pase sin ella pero me alegro que de momento la tenga ahí.
Y también por mi, no nos engañemos, para mi tambien ha supuesto un gran alivio ver como mi hijo quería mi pecho a pesar de todo, sabiendo que con él se sentia mejor y estaba protegido, sabiendo que gracias a el esa gastroenteritis no fue al final tan aguda como dijeron…
BENDITA TETA.
Si alguien tenía aún alguna duda sobre las bondades y beneficios de amamantar espero haberles ayudado a disiparla.
Las mujeres poseemos el mayor don divino que se puede ofrecer aquí en la Tierra. Damos la vida a nuestros hijos, lo protegemos nueve meses dentro de nuestro ser y una vez fuera seguimos unidos a ellos a través de la lactancia. El lazo que proporciona la lactancia materna difícilmente será superado por nada más.
Mujeres, ¿no os dais cuenta del maravilloso poder que tenéis pudiendo amamantar?.
Hola linda!!! hermosa tu experiencia, es que la teta de mamá es así, es un milagro, un regalo inigualable que se nos pudo haber dado!!!
ResponderEliminarMe alegro que ya estan bien ambos, ahora debo agarrar tranco porque en unas horas empieza la ultima jornada del Seminario de Parto Natural al que hemos estado asistiendo bebé Josué y yo, un besote querida, y muchos cariños a la distancia para tu bebé!!!
cuanto me alegro q el enano este mejor! y que bueno que cuenta con "su teta" siempre disponible! el mejor alimento y el mayor consuelo...Un abrazo amiga!
ResponderEliminarHermoso lo que haz escrito mujer!!! Es tan reconfortante saber que el pecho es mucho más que leche y alimento... es remedio, es consuelo, es protección y mucho más que quizás, nosotyras como adultas, ya hemos olvidado... eres grande, me maravilla contar con mujeres como tu, aunque sea por medio de blogs y redes sociales, sobretodo cuando la gran parte de las personas, y por qué no decirlo, mujeres, creen que darme pecho es malo, que lo malcrías, y cosas por el estilo... Un abrazo enorme, a ti y a ese nene que tiene la vida cerca suyo, "su teta"
ResponderEliminarque lindo lo que escribiste! y cuanta verdad! no pude dejar de emocionarme con los ultimos parrafos, y es que como bien dices, la teta es maravillosa. Que bueno que ya esten mejor y que tu angelito haya superado rapido su enfermedad! Un abrazo!
ResponderEliminarEn mi caso, siempre digo que será casualidad, pero mis dos hijos no cogieron nada grave, algo de mocos puntuales, en el primer año de vida. Será la leche mágica? podría ser. Me ha gustado mucho que explicaras esta bonita experiencia
ResponderEliminarNosotros también pasamos por lo mismo en una ocasión y me sorprendió gratamente comprobar cuánto reconforta le leche materna a nuestros hijos. Como alguna vez leí en El blog alternativo, la leche materna es antibiótico y vacuna.
ResponderEliminarSaludos!
Gracitata:
ResponderEliminarLamento mucho que tu hijo pasara por esa molesta gastroenteritis. A mi hija le dió justo al cumplir el año, producto de los remedios que le dieron para atacar una bronquitis. Imagino todo lo que sufriste cada vez que vomitaba... Gracias a Dios, y gracias a tu pecho, que estuvo ahí, de manera permanente, tu hijo no se deshidrató y estuvo acompañadito en cuerpo y alma.
Un gran abrazo!!!
Una vez más, me ha encantado este post. A mi blog roll vas de cabeza! :)
ResponderEliminarMI hijo lleva una semana y media con bronquitis y otitis y ha dejado de tomar papillas porque las vomitaba con mocos. También le he tenido a pecho todo el día y gracias a eo, ha aguantado sin otra cosa. Es un gran consuelo ver cómo el pecho puede calmar y consolar a nuestros hijos. Si es q Dios lo ha hecho todo muy bien xa que una madre pueda cuidar de su hijo. Tan sólo hay q seguir lo q dicta la naturaleza, nuestros instintos..